Islas Sorlingas: Así es la liga de fútbol más pequeña del mundo
No cabe duda que Inglaterra es tierra de fútbol. Es la cuna de este deporte y hogar de algunos de los mejores clubes que jamás lo han practicado. Con la Premier League, que a día de hoy es, probablemente, la mejor liga del mundo.
Las Islas Sorlingas (Isles of Scilly en inglés), es un archipiélago formado por 145 islas situado al suroeste de Gran Bretaña. A pesar del número, la mayoría son islotes y solo 5 están habitadas. En total, la población apenas supera los 2.200 habitantes.
La isla más grande es St Mary’s, donde vive la mayoría de la población del archipiélago. Es en esta isla donde está la sede de los dos únicos equipos integrantes de la liga: los Woolpack Wonderers y los Garrison Gunners.
Liga desde 1920 con cuatro competiciones
La liga de fútbol de las Sorlingas tiene sus orígenes en 1920. Ese año se inició la Lyonnesse Cup, una competición entre equipos de las cinco islas habitadas. Pero para la década de los 50 solo quedaban dos equipos, los Rangers y los Rovers, que posteriormente se renombrarían como los Wonderers y los Gunners.
A pesar de ser solo dos equipos, cada año hay hasta cuatro títulos en juego.
– El más duradero es la Liga, donde se juegan 18 partidos entre los dos equipos entre octubre y marzo.
– Aparte está la Charity Shield, que es el primer partido de la temporada.
– Y la Wholesalers Cup y la Foredeck Cup, que se juegan a partidos de ida y vuelta.
– Y para culminar todavía tienen, como sus vecinos de Inglaterra, el famoso Boxing Day (26 de diciembre), que en las Sorlingas se celebra con un partido de jóvenes contra mayores.
Además de ser solo dos equipos, ambos juegan en el mismo campo, el Garrison Field. Pero curiosamente, para las copas de ida y vuelta se tiene en cuenta el factor campo para el valor doble de los goles fuera de casa.
Cada año eligen los equipos en el pub
Siendo solo dos equipos, cabría esperar que la competición fuera aburrida o que, a la larga, un equipo se hiciera mucho más fuerte que el otro. Pero la verdad es que son equipos muy equilibrados. Y tienen su manera de que siga siendo así.
Los dos equipos en realidad pertenecen a un único club de fútbol: el St Mary’s. Antes de cada temporada, los integrantes del club al completo se reúnen en un pub y designan a dos capitanes. Uno para cada equipo.
Después dividen al resto de jugadores entre defensas, mediocampistas y delanteros. Y, como si del patio del recreo se tratara, los capitanes van eligiendo uno por uno los integrantes de cada equipo para la temporada.
Sin embargo, los equipos no son fijos. Hay una ventana de fichajes por Navidad que tiene como objetivo compensar las diferencias en calidad de los dos equipos. O también por si ha habido algún problema como una lesión, por ejemplo.
Aun así, después de tantas semanas jugando siempre los mismos es lógico pensar que los partidos acabarían aburriendo. Se conocerían demasiado bien. Pero tampoco es el caso porque bien por trabajo o bien por otras vicisitudes propias de la vida común, el once titular varía mucho.
A esto hay que sumar que, cuando las condiciones meteorológicas lo permiten, acuden jugadores desde otras islas.
Y por si todo esto fuera poco, para terminar hay que explicar que el campo está en la cima de una colina donde suelen soplar fuertes vientos del noroeste, lo que contribuye, y mucho, a dar una enorme emoción a los partidos.
Relacionada con la FIFA y adidas
La Liga de las Sorlingas incluso mantiene buena relación con la FIFA.
En el museo de esta institución en Zúrich hay una réplica de la Lyonnesse Cup, el trofeo de fútbol más pequeño del mundo y que se disputa entre el mejor once de las Sorlingas contra un equipo de la vecina región inglesa de Cornualles.
Además, en el año 2008 adidas grabó un anuncio sobre esta liga. David Beckham, Steven Gerrard, Patrick Vieira o Michael Ballack visitaron el Garrison Field para dar consejos futbolísticos a los jóvenes de la isla.
Esta competición tiene un peso tremendo en la vida local de la gente. Para la mayoría es su gran entretenimiento, en una isla pequeña donde hay bastante poco que hacer.
Más peligrosa la emigración que la pandemia
Por lo que significa en la vida local, a pesar de la pandemia el fútbol ha seguido presente en las Sorlingas.
Durante algunos meses la competición tuvo que detenerse, pero después se completó. De los habituales 17 partidos de Liga, esta última temporada solo se han jugado 8. Y los Wanderers salieron vencedores.
Así que en este infausto año, ni siquiera el coronavirus ha logrado detener a esta pequeña liga. Pero la pérdida de gente joven sí que podría acabar con ella.
A partir de los 16 años, los jóvenes que quieran continuar su educación deben ir a Gran Bretaña. Allí también hay más oportunidades laborales, por lo que muchos no vuelven.
Esto provoca que en la actualidad la mayoría de los jugadores de la liga tengan entre 30 y 50 años. Y, temporada tras temporada, tienen que buscarse las mañas para encontrar personas suficientes que quieran participar.
Los habitantes de otras islas tampoco pueden ser fijos ya que dependen de las condiciones del mar para poder ir a jugar. Así que, en definitiva, se tiene que crear una liga de fútbol apañándose con una población envejecida y que en total suma poco más de 2.000 personas.