“A Maradona lo mataron”, dice el abogado de la enfermera que estaba de guardia cuando murió
“A Diego lo mataron”, dijo ayer miércoles el abogado de la enfermera Dahiana Madrid, que junto a otros seis miembros del equipo médico del astro argentino están bajo sospecha y tienen prohibido salir del país desde finales de mayo.
La Justicia argentina los considera imputados por el presunto “homicidio simple con dolo eventual” en la causa en que se investigan las circunstancias que rodearon el fallecimiento de Diego Maradona, al apuntar a los médicos que entonces trataban al ídolo del fútbol como los responsables de su muerte en 2020, mientras convalecía de una cirugía por un hematoma en la cabeza.
“A Diego lo mataron”, declaró categórico a los periodistas el abogado Rodolfo Baqué, al aseverar que uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos era tratado por una afección cardíaca, pero a la vez recibía medicamentos psiquiátricos que le aceleraban el pulso.
Además, según el abogado, Maradona sufrió una caída y cuando la enfermera pidió hacerle una tomografía, uno de sus allegados lo descartó para evitar los comentarios de la prensa.
La enfermera, que estaba de guardia el día en que murió Maradona, ha tenido que acudir ayer miércoles a declarar ante la fiscalía de San Isidro, a las afueras de Buenos Aires, por ser sospechosa de homicidio junto a los otros seis miembros del equipo médico que en el momento de su muerte estaba encargado de atender al exfutbolista.
Homicidio simple con dolo eventual
Dahiana Gisela Madrid, al igual que el resto del equipo médico que cuidaba a Maradona, es investigada bajo el cargo de “homicidio simple con dolo eventual”, un delito que se castiga con una pena de 8 a 25 años de cárcel.
La fiscalía entiende que Maradona recibió una atención “deficitaria” por parte de los integrantes del equipo médico que, aunque sabían que podía morir, no hicieron nada para evitarlo.
Dahiana Gisela Madrid era la enfermera de Maradona durante el día. Antes que ella, el lunes, tuvo que declarar el enfermero que lo cuidaba de noche, Ricardo Almirón, abrió la ronda de declaraciones indagatorias, quien reveló anomalías al asegurar que nunca había sido notificado de que el paciente padecía cardiopatías.
Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020, a los 60 años, debido a una crisis cardiorrespiratoria mientras estaba solo en su cama en una casa del barrio privado San Andrés, al norte de Buenos Aires, donde se recuperaba de una cirugía de la cabeza por un hematoma subdural.
Culpa a los médicos
“Hay una responsabilidad de los médicos que lo trataban (…) En el fondo hubo muchas alertas de que Maradona, un día antes o un día después, iba a fallecer. Y ninguno de los médicos hicieron algo para evitarlo”, aseveró Baqué en una pausa de la audiencia de declaración indagatoria de Dahiana Gisela Madrid, que se extendió durante casi diez horas.
“Lo que hizo Madrid fue cumplir las indicaciones de los médicos tratantes”, dijo el abogado, quien adelantó que pedirá el sobreseimiento de su defendida esta semana y denunció que “se orquestó una campaña” en su contra.
Madrid fue una de las personas que halló a Maradona sin signos vitales e intentó reanimarlo, según explicó en su primera declaración como testigo.
El juez de garantías del caso, Orlando Díaz, resolvió el 25 de mayo “prohibir la salida del país” del neurocirujano Leopoldo Luque; la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Ángel Díaz; la médica que coordinaba la internación domiciliaria del exfutbolista, Nancy Forlini; el coordinador de los enfermeros, Mariano Perroni, y los enfermeros Ricardo Omar Almirón y Dahiana Gisela Madrid.