La ciudad iraní de Ahvaz podría haber tenido el jueves la temperatura más alta de la historia con 54 grados
La ciudad iraní de Ahvaz registró el jueves pasado, por la tarde, la temperatura más alta jamás medida en estas fechas en el país, y podría haber empatado el récord mundial de temperatura más extrema registrada en la tierra en un mes de junio.
Etienne Kapikian, meteorólogo de la agencia MeteoFrance, ha publicado en Twitter que la ciudad de Ahvaz alanzó los 53,7 grados centígrados (128,7 grados Fahrenheit), en lo que supone un “nuevo récord nacional absoluto de calor en Irán”, y que también podría suponer la temperatura más alta jamás registrada en junio sobre el continente asiático. La anterior temperatura más alta de Irán fue 127,4.
La página web de Weather Underground indica la temperatura en Ahvaz fue todavía más alta, ya que ellos cifran la máxima en 129.2 grados entre las cinco menos diez y las cinco en puto de la tarde, hora local.
Si esa medición fuese la real, la temperatura de Ahvaz estaría igualando los récords de máximas hasta ahora conocidos en la tierra, y avalados por una fiable medición. Y es que en los registros modernos, las mediciones creíbles más extremas se produjeron el 21 de julio de 2016 en Mitribah (Kuwait) y el 30m de junio de 2013 en el Valle de la Muerte de California (EE.UU.). En ambos casos los termómetros alcanzaron los 129,2 grados Fahrenheit.
El Valle de la Muerte
Es verdad que hay un dato por encima de éste, contabilizado también en el Valle de la Muerte, el 10 de julio de 2013, cuando algunos expertos aseguran que se alcanzaron los 134 grados Fahrenheit (56,7 centígrados). Pero las críticas contra aquella medición hacen que muchos expertos la hayan desestimado como fiable.
Ahora en cualquier caso, habrá que esperar un tiempo para que la temperatura de Ahvaz se considere oficial, y será preciso que la revise la Organización Meteorológica Mundial.
Ahvaz es una ciudad en la que habitan 1,1 millones de personas, y con unas teroríficas condiciones de contaminación. En este caso, además, el enorme calor se vio empeorado por unas cifras absolutamente inusuales de humedad, que hacían aún más asfixiante la sensación térmica. En lo que los expertos llaman ‘punto de rocío’ la humedad podría haber disparado la sensación térmica hasta los 140 grados Fahrenheit, en lo que se consideraría una cifra superior a lo que actualmente es posible calcular.
Además, el calor ya había batido récords el miércoles en lo que parecían cifras insuperables, que se quedaron cortas sólo 24 horas después.
Otro mes de récords
Estas temperaturas extremas iraníes llegan justo un mes después de que varios lugares en el Oriente Medio registrasen sus temperaturas más calientes de la historia de mayo. Ocurrió durante otra ola de calor excepcional, en la que el28 de mayo la ciudad paquistaní occidental de Turbat alcanzó los 128,3 grados (53,5 centígrados), lo que está considerado como la temperatura más alta de todos los tiempos en ese país y la temperatura récord mundial de mayo.
Todas estas temperaturas récord en los últimos años, incluyendo la lectura del jueves en Ahvaz, así como los establecidos en Kuwait y Valle de la Muerte en 2016 y 2013, representan los extremos de temperatura y están en perfecta consonancia con lo que los científicos especializados en el clima aseguran que nos está afectando ya a consecuencia del calentamiento global.
La Academia Nacional de Ciencias publicó un informe en 2016 en el que aseguran que el recrudecimiento de las olas de calor son uno de los fenómenos meteorológicos que se pueden conectar más fácilmente con el cambio climático causado por el hombre.
Y otro estudio, publicado en la revista Nature Climate Change en 2015, advirtió que a finales de siglo, debido al cambio climático, las temperaturas en el Medio Oriente pueden llegar a ser demasiado caliente para la supervivencia humana.