Cómo ir de mochilero a Singapur, sin arruinarse en el intento
Singapur es uno de los países más curiosos de Asia. Su downtown tiene poco que envidiar a grandes ciudades como Nueva York o Tokyo, mientras que en sus calles sigue respirándose el aire inconfundible del Sureste Asiático.
Pero si estás pensando en hacer una pequeña escala en la ciudad – o una estancia más larga para disfrutar de su amplia oferta de ocio – los precios pueden resultar un freno decisivo, ya que son más bien caros en comparación con el resto de países de la región.
A continuación se muestran algunos consejos para los mochileros que queráis hacer una parada en la ‘La Ciudad del León’ sin arruinaros en el intento.
Alojamiento decente por menos de 20 euros
Singapur cuenta con algunos de los hoteles más lujosos y bonitos del mundo. El Marina Bay Sands, un edificio que imita a un barco a 200 metros de altura desde el suelo, es uno de estos hoteles.
Si te alojas en él podrás disfrutar de una piscina infinita en su azotea, con vistas a todo el país y al estrecho que lo separa de Indonesia. Pero los precios más baratos están alrededor de los 200€ la noche.
Para los ahorradores, Singapur cuenta con una gran oferta de hostels y hoteles cápsula, principalmente en Chinatown y Kampong Glam, el barrio musulmán. Las dos ubicaciones son perfectas para el turismo.
Chinatown está en el centro neurálgico de la ciudad, con la mayor concentración de centros comerciales y a 15 minutos a pie de Marina Bay, donde todas las noches podemos disfrutar de espectáculos de agua y luces.
El barrio musulmán está más alejado del centro, pero el ambiente es muy juvenil y diverso, y está cerca del barrio indio. También cuenta con grandes atracciones turísticas como la Mezquita del Sultán.
Tanto en uno como en otro, por un precio entre 12 y 20 euros la noche tendrás una cama para dormir, ducha y enchufes.
En muchos casos el desayuno está incluido y, con suerte, tendrán tostadas de kaya para desayunar, una mermelada de coco típica de Singapur.
Es cierto que no cuentan con las comodidades de una habitación y baño privados, pero el precio es mucho más bajo y eso, día tras día, se nota.
Además, los hostels de Singapur son la primera opción para la mayoría de gente joven de los países vecinos. Y un importante atractivo añadido es que en ellos, por supuesto, conocerás a mochileros de todo el mundo, pero también a personas de Indonesia, Malasia o Brunéi que estén en el país por diferentes razones.
Moverse es fácil
En Singapur el metro es el principal medio de transporte público. Apenas se ven atascos en una ciudad muy grande con un centro financiero muy pequeño en proporción, y esto es gracias al buen funcionamiento y conexiones del suburbano.
En poco más de media hora puedes ir desde el aeropuerto al centro.
El precio va en función de la distancia entre las paradas, pero está alrededor de 1,80 $ (1,12€) para trayectos medio-largos, y 1,20 $ (0,75€) para trayectos cortos.
Además no es necesario hacer colas para comprar billetes: pasando la tarjeta de crédito por el lector a la entrada y a la salida se carga directamente el precio del viaje.
Singapur también cuenta con muchas líneas de autobuses que son la única opción para determinados lugares como el Zoo. Los tiempos son fiables y no suelen estar muy concurridos.
En general, el transporte en Singapur es ejemplar y puedes fiarte de lo que te diga Google Maps.
Conexión a internet
Por Singapur es relativamente sencillo encontrar redes wifi gratuitas.
Los alojamientos y restaurantes suelen tener wifi para los clientes. Y otros lugares turísticos como el Zoo y los Jardines de la Bahía también cuentan con acceso a internet sin coste.
Pero si quieres permanecer continuamente conectado lo mejor es conseguir una tarjeta prepago.
Se pueden comprar en el mismo aeropuerto y son razonablemente baratas y útiles. Digo útiles porque, aparte de ofrecer conexión en Singapur, también te mantienen conectado en Indonesia y Malasia.
Una tarjeta para usarla durante 12 días se puede conseguir por 30 $ (18,60€).
Dónde y qué comer
Singapur es un lugar mezcla de culturas. Chinos, malayos, tamiles, indonesios y británicos han influido en la ciudad, y eso se nota en la diversidad de su comida.
Como en toda gran ciudad se pueden encontrar gastronomías de todo el mundo.
Son comunes en el centro los italianos, americanos y japoneses. Incluso hay varios españoles. Pero los precios más económicos, y a mi parecer los platos más interesantes, están en otros lugares.
En Chinatown hay centros comerciales gigantescos donde algunas plantas se reservan enteramente a locales de comida. A cualquier hora que pasemos puede verse gente sentada comiendo en mesas comunes.
En estos sitios sirven comida típicamente china a muy buen precio y de un sabor increíble. De hecho, en este barrio está el famoso Hong Kong Soya Sauce Chicken Rice and Noodle, un local de comida rápida con una estrella Michelin.
Pero si no quieres esperar las cerca de dos horas de cola que hay para comer ahí, en cualquier otro puesto de Chinatown encontrarás un precio, variedad y sabor parecidos.
En el barrio indio y en el barrio musulmán también tienen comida deliciosa a precios increíbles.
El Zam Zam, justo al lado de la Mezquita del Sultán, es famoso por el murtabak, un plato típico de los musulmanes asiáticos. Consiste en masa frita rellena de carne picada asada, ajo, huevo y cebolla, y en el Zam Zam lo puedes encontrar de pollo, ternera, cordero, ciervo y pescado. Se suele acompañar de té helado y muy dulce. El precio es de 6 $ (3,7€) para el murtabak pequeño y 9 $ (5,6€) el grande. Si vas a ir allí a cenar, yo recomiendo pedir el pequeño porque es suficiente.
El barrio indio tiene muchos puestos callejeros donde comprar fruta fresca y comida rápida. Para combatir el calor puedes refrescarte con un coco por 2,5$ (1,55€) y la comida en general es muy barata.
No obstante, creo que es importante decir que si lo que buscas es un establecimiento con un certificado de sanidad parecido al europeo, éste no es el mejor barrio.
Una zona con restaurantes más diversos y con un precio normal es Boat Quay, muy cerca del centro y con unas increíbles vistas al Marina Bay Sands.
Aquí hay restaurantes de todos los tipos, con predominio de restaurantes asiáticos de arroz, fideos y marisco. Por menos de 10$ estarás servido.
¿Y para tomar algo?
Una parte importante de los viajes es conocer gente y salir a tomar algo. Pero no tardaremos un minuto en adivinar que los precios son caros, sobre todo si quieres tomarte alguna cerveza o una copa, sobre todo en Singapur. En todo Singapur
El país que tiene unos impuestos muy altos para el alcohol y la cerveza más barata que se encuentra en un supermercado cuesta alrededor de 5$ la lata de medio litro (algo más de 3€).
En locales, lo más rentable es Boat Quay, donde algunos restaurantes sirven una jarra de 1L de cerveza Tiger al precio récord de 9$ (5,58€). También hay muchos pubs y discotecas con buen ambiente, pero cuidado con no confundirte ya que entre ellos se mezclan peligrosamente algunos clubs de striptease.
Pero preguntes donde preguntes, el lugar de fiesta de referencia en Singapur es Clarke Quay. El ambiente es muy bueno tanto de día como de noche, aunque la gente que lo visita son principalmente turistas occidentales.
Zouk, votada como la mejor discoteca de Asia, está en Clarke Quay, con un precio para entrar de 30$ (18,5€).
Otras discotecas importantes están en la isla de Sentosa o en Orchard Road. Los precios son igualmente altos, pero el espectáculo merece la pena.
Si tu estancia en Singapur coincide de jueves a sábado, replantéate gastarte unos cuantos euros en ello. Al fin y al cabo, no todos los días estás en Singapur.