Europa estudia volver al teletrabajo como fórmula para ahorrar gas y petróleo
El teletrabajo como ahorro puede ser una de las grandes medidas para el invierno.
Europa comienza a pensar en las maneras de enfrentarse a un invierno en el que la crisis del gas y el petróleo pueden poner todo patas arriba.
Los gobiernos son conscientes de que los objetivos de almacenar ahora todas las reservas posibles podrían resolver el problema de un trimestre, pero el invierno amenaza con ser muy largo y en muchos de los países de la UE hace demasiado frío.
Por eso cualquier iniciativa es bienvenida y de ahí que la idea de volver a la vida de la pandemia, pero con otros objetivos, pueda ser una ayuda importante.
Vuelta al teletrabajo
La iniciativa la ha puesto sobre la mesa el grupo alemán de bienes de consumo Henkel, que ha planteado regresar al teletrabajo con la misma intensidad que si el SARS.C0V.2 volviese a darnos un buen susto, como ha ocurrido en China.
El jefe de Henkel, Carsten Knobel, manifestó ayer que el grupo de Düsseldorf está pensando en cómo hacer una contribución importante al ahorro de gas, que después de la invasión rusa de Ucrania y las sanciones económicas posteriores se ha convertido en un problema acuciante.
- “Es posible que en todos los casos en los que sea posible, volvamos al teletrabajo por un período limitado, como en la pandemia. Pero esta vez buscando el interés nacional y con el objetivo de ahorrar energía”.
Una solución que puede aportar algo más que un granito de arena al consumo energético del otoño y, sobre todo, del invierno
Primero porque la empresa Henkel, y todas las que se sumen a esta idea, podrían reducir drásticamente el consumo de luz y los costes que supone mantener las temperaturas en los edificios de oficinas.
En el hogar apenas aumentaría el consumo
Es cierto que habría que calentar las casas donde se quedan los trabajadores, pero en los países del centro y del norte de Europa nadie apaga la calefacción al salir de casa, porque encenderla a la vuelta, partiendo de temperaturas bajas, supondría un mayor coste.
Así que eso apenas supondría un incremento de consumos, ya que las casas de los empleados se calentarían normalmente.
Por eso la idea de Henkel ha sido muy bien recibida:
- “Para que ahorremos la mayor cantidad de gas posible y consigamos que los tanques de almacenamiento estén suficientemente llenos durante la mayor cantidad de tiempo que podamos.”
Ahorro de petróleo
También está la reducción del consumo de petróleo que supondría la generalización de esta medida.
Porque los trabajadores que se quedasen en casa no tendrían que coger el coche, con el ahorro que aportaría cada uno.
Y, sobre todo, con lo que supondría la reducción de tráfico en las ciudades, que también reduce en mucho el consumo al eliminar drásticamente los atascos.
Una idea que puede ser muy seguida por las empresas europeas y que nos podría retrotraer en el tiempo y volvernos a situar en la época dura de la pandemia, cuando casi todo el mundo trabajaba desde casa.
¿Quién es la empresa alemana Henkel?
Para los más jóvenes, Henkel es la empresa que fabrica el pegamento en barra Pritt, que está en la gran mayoría de las mesas de oficina y es uno de los elementos más importantes del material escolar de nuestros hijos.
Pero el consorcio alemán no sólo produce productos adhesivos, entre los que también podemos incluir el Loctite, No más Clavos…
También fabrican productos para el cabello y cosméticos, con marcas tan conocidas como Schwarzkopf y los desodorantes Fa, Licor del Polo, La Toja…
Y en cuanto a los detergentes, que son quizás su punto fuerte, son más conocidos en nuestro país marcas como Dixán, Wipp Expres, Vernel… Y para los no tan jóvenes podemos destacar dos marcas que tuvieron sus años dorados hace algo así como medio siglo: Persil, y Vim.