¿Cuáles son los mejores productos de higiene corporal?

Además de las diferentes cremas que se aplican sobre el cuerpo para intentar mejorar su aspecto o mantenerlo bien hidratado, hay otros productos que están en contacto con éste, como el gel de ducha o el desodorante, que sirven especialmente para la higiene y el cuidado corporal. Aunque no cabe duda de que sean absolutamente necesarios en el día a día de cualquiera, hay ciertas recomendaciones e información que se tiene que tener en cuenta para poder elegir el producto más adecuado.

A parte de saber leer bien las etiquetas, también es importante saber cómo distinguir si un jabón respeta la piel o si su efecto es realmente eficaz. Y es que el cuidado corporal, que se suele traducir en una ducha es un hábito que, además de reportar un olor agradable o un momento de relax, supone una defensa contra aquellos agentes externos como microbios y parásitos que se depositan en el cuerpo durante el día.

Gel de ducha

Por norma general, el gel de ducha tiene un poder desengrasante mayor que el del jabón tradicional, por lo que es capaz de limpiar y proteger de forma más eficaz al cuerpo. Nuestra piel, por su parte, tiene la capacidad de reconstruir su propia capa protectora de forma natural para protegernos, por lo que con una ducha al día es suficiente para hacer un uso adecuado de este producto.

Por otro lado, el gel de ducha, ya tenga mayor o menor capacidad de crear espuma, con un aroma u otro o con una textura más densa o más líquida, suele tener el mismo efecto desengrasante y limpiador sobre la piel. Ahora bien, puede incluir algunos principios activos que le hagan más beneficioso para el cuerpo.

Por ejemplo, hay algunos geles que anuncian en su etiqueta un “efecto hidratante”. Esta sensación de hidratación, que aporta bienestar, debe complementarse con la utilización de una crema adecuada para conseguir nutrir en mayor profundidad la piel.

También se suele aludir al pH Neutro en las etiquetas de jabón y gel, que mide la acidez que puede tener algún producto, y se busca que sea neutro porque eso significa que es similar al pH de la piel y, por lo tanto, es lo menos agresivo posible para ésta. El pH ideal de un gel debe ser lo más próximo posible al que contiene una piel sana (5,5), de forma que ésta no se vea alterada. Esto es fundamental para prevenir la aparición de problemas cutáneos y que se proteja la barrera de protección que la piel es capaz de formar por sí misma.

Jabón tradicional

Propiedades del jabón tradicional

El jabón tradicional está formado, principalmente, por materias grasas de origen animal o vegetal, a la que luego se suelen añadir otros componentes para producir espuma, algún aroma determinado o un aspecto concreto. Se comercializan en forma de pastillas y, hoy en día, es más que habitual que se utilice para la limpieza y el cuidado de las manos.

A decir verdad, la diferencia entre las marcas de jabón tradicional es más bien olfativa, ya que sus fabricantes le añaden diferentes aromas para resultar agradable al ser usado. Por lo tanto, la decisión de compra dependerá, sobre todo, de los gustos personales, puesto que sus cualidades y composición general serán semejantes.

DesodoranteComponentes del desodorante

El desodorante es uno de los productos más indispensables para el cuidado y la higiene personal. Su función es la de regular la sudoración y combatir el mal olor. En este aspecto, hay dos términos que a veces se usan indistintamente pero que son diferentes: “desodorante” y “antitranspirante”. El antitranspirante es una sustancia que bloquea la salida del sudor gracias a su vez al bloqueo de las glándulas sudoríparas. Normalmente, todos los desodorantes llevan este compuesto, pero además llevan otros.

Los desodorantes también tienen un efecto antiséptico y absorbente. Éste último está compuesto sobre todo de talco. El antiséptico impide el crecimiento de las bacterias y, por tanto, la formación del olor desagradable a sudor. Otro de los ingredientes más conocidos es el alcohol. Éste tiene un alto poder para eliminar bacterias y microbios y, además, disminuye la descomposición del sudor, pero hay que tener especial cuidado porque puede causar irritaciones o reacciones alérgicas en personas con pieles sensibles. Por ello, hoy en día existen también opciones sin alcohol para pieles delicadas.

Los antitranspirantes, compuestos por aluminio, deben retirarse de la piel antes de acostarse, pues no es saludable que los poros queden obstruidos demasiado tiempo. Asimismo, muchas veces se ha extendido el rumor en internet de que los desodorantes causan cáncer de mama porque cuando se cierran los poros con el efecto antitranspirante se acumulan toxinas en esa zona. Sin embargo, no hay ningún estudio científico que avale tal afirmación.