Primer ataque del Daesh en Irán: dos equipos de terroristas entran vestidos de mujer y matan a 12 personas
Ha sido el primer ataque del Daesh en Irán. Y ha sido un doble ataque, al Parlamento, en Teherán, y al mausoleo del Ayatollah Khomeini, a unos 20 kilómetros al sur. Los terroristas iban armados con cinturones de explosivos y fusiles AK. Y entraron vestidos de mujer, escondiendo las armas bajo el burka. A estas horas las cifras hablan ya de al menos 12 personas muertas y más de 35 heridos. En los dos atentados hubo disparos y explosiones.
El asalto el parlamento comenzó cuando cuatro hombres armados con fusiles irrumpieron en el complejo de edificios con intención de capturar rehenes y armados con fusiles, y uno de ellos portando un cinturón de explosivos.
Los disparos de los fusiles se escuchaban desde los aledaños de un parlamento que quedaba enseguida aislado, al cerrarse las puertas y desconectarse todas las posibilidades de utilizar la telefonía móvil desde el interior.
“Yo estaba dentro cuando comenzaron los disparos. Todo el mundo estaba conmocionado y asustado. Vi a dos hombres que comenzaban a disparar al azar a la gente”, ha contado con periodista que no ha querido ser identificado.
Los asaltantes no ocuparon todos los edificios, y la actividad se mantenía en otras partes del mismo complejo.
Al parecer, los atacantes entraron vestidos de mujer para poder saltarse los controles de seguridad, según declaró el viceministro del Interior, Mohammad Hossein Zolfaghari, a la televisión estatal de Irán.
Fue un asalto que duró unas cinco horas y que según fuentes oficiales acabó con la muerte de los cuatro asaltantes, si bien todavía no existen noticias fiables sobre la situación de los rehenes y se sabe que una bomba explotó en el cuarto piso.
Pero ahí no volvió la paz a Irán ya que muy poco después, a poco menos de 20 kilómetros al sur, se conoció que estaba comenzando otro asalto, esta vez en el mausoleo del Ayatollah Ruhollah Khomeini, que estableció la República Islámica después de deponer al Shah en 1979.
Según la agencia de noticias IRNA, un atacante suicida detonó la bomba que llevaba adosada a su cuerpo, sin haber conseguido entrar en el santuario, y otro asaltante fue abatido por la policía. Se sabe que hay heridos pero aún se desconoce el alcance de la tragedia.
Los datos facilitados por fuentes policiales hablan de cuatro atacantes. Uno de ellos se habría inmolado frente a una estación de policía al hacer estallar su cinturón de explosivos, Dos más habrían muerto, uno abatido por la policía durante el tiroteo y el otro suicidándose con una cápsula de cianuro, y el cuarto sería una mujer que habría sido detenida.
No son nada habituales los ataques en las principales ciudades iraníes, pero últimamente no son tan extraños los incidentes en las zonas más remotas, donde un grupo radical suní llamado ‘Jundallah’, y su grupúsculo escindido, ‘Ansar al Furgan’, han sembrado el terrordesde hace casi una década.
También DAESH está cometiendo ataques contra civiles chiítas, ya que ellos pertenecen a una puritana del islam sunita que no reconoce ni siquiera a algunos sunitas. Pero un ataque con este grado de preparación y coordinación no se recuerda en Irán. Y llega en un momento complicado para la región, ya que los países árabes del Golfo presionan para conseguir un aislamiento más contundente de Irán, su archienemigo regional.
El DAESH hizo púbico en marzo y vídeo amenazando con que “conquistará Irán y restaurará en el poder a la nación suní tal y como lo estaba antes”, al tiempo que acusa a los iraníes de perseguir a los sunitas lo largo de los siglos.