5º aniversario del héroe Ignacio Echevarría, que dio su vida en el Puente de Londres
En el 5º aniversario de la muerte de Ignacio Echevarría queremos recordar su figura y revivir aquellos terribles momentos, marcados por la serenidad de su familia.
Los padres de Ignacio Echevarría viajaron dos días después a Londres con la intención de intensificar la búsqueda y conseguir localizar su hijo, del que no tenían noticias desde el atentado en el Puente de Londres.
El joven madrileño de origen asturiano, de 39 años, que hoy sabemos que fue un héroe, estuvo días desparecido desde que el sábado 3 de junio acudió a rescatar a una mujer que estaba siendo atacada por uno de los terroristas, ‘armado’ sólo con su monopatín.
Las primeras noticias decían que Ignacio no se encontraba entre las víctimas mortales identificadas, y el banco con el que se había desplazado a la capital inglesa, el HSBC, puso enseguida un detective a disposición de la familia para que se dedicase a buscar al joven español.
También una de sus hermanas, Isabel, que vivía aquellos días en Londres, estuvo yendo de un hospital a otro, sin descanso, buscando noticias de Ignacio con la colaboración de su marido.
El padre de Ignacio, Joaquín Echevarría, nacido en Oviedo, reconocía en aquellas angustiosas horas que seguían sin noticias sobre el paradero de su hijo, y que la Policía inglesa había pedido a la española las huellas dactilares de Ignacio para intentar localizarlo entre los heridos.
Su padre, como toda la familia, dieron muestras constantes de una serenidad admirable en aquellos trágicos y angustiosos momentos llenos de incertidumbre y preocupación.
Y en el programa ‘La Mañana’ de Antena 3, en el que habló vía telefónica, explicaba las razones de su esperanza:
- “Lo que sabemos es que Ignacio acudió a socorrer a una mujer tras bajarse de la bicicleta, imagino que municipal, al ver que la estaban atacando. Había allí también un policía tendido en el suelo, creen que muerto, y en el enfrentamiento con el terrorista éste le tiró al suelo. Pero en principio y por lo que nos cuentan lo amigos, no se ensañó más con él. No sabemos si le apuñaló o no. Sólo que vieron cómo le tiró al suelo y siguió su camino. Imaginamos que le habrán herido, pero no sabemos más. Sólo nos han dicho que no se ensañó más con Ignacio”.
En aquellas primeras horas lo único que se sabía era que no estaba entre las víctimas mortales, y por lo tanto la esperanza se mantenía alta.
Pero las buenas noticias llegaban, por más que una hermana de Ignacio, residente en Londres, se había pasado la noche buscándolo, en compañía de su marido, por todos los hospitales.
Y en aquel programa, con la serenidad que, como dijo más tarde, le daba su fe, contó alguna cosa de su hijo, del que nadie sabía nada.
- “Mi hijo es un hombre que estudió una licenciatura en derecho en España y luego realizó un master de derecho francés en la Sorbona. Y en Londres trabaja como analista de prevención en blanqueo de capitales en el HSBC.”
Y añadió unas palabras que luego resultarían premonitorias: “No sé si mi hijo es un héroe. Vio algo y reaccionó así”.
Las esperanzas de encontrarlo con vida se mantuvieron durante muchas horas. Y la narración de los hechos por parte de los amigos, asegurando que el terrorista lo tiró al suelo pero no hizo más, ayuda a mantener viva la esperanza.
El sueño entonces era pensar que pudiese estar en un hospital, sedado tras haber sido operado, lo que explicaría que él no diese señales de vida a la vez que dificultaría su identificación al encontrarse sin documentos encima.
Uno de los amigos que le acompañaban en el momento del suceso, Guillermo, también contó en Antena 3 lo que había pasado:
- “Estuvimos montando en bicicleta. Ignacio llevaba, además, su monopatín. De pronto vimos como venir a mucha gente que parecía borracha… pero no. Y entonces nos percatamos de que un policía caía al suelo, y nos dimos cuenta de que una mujer estaba siendo acuchillada”.
Y continuó el relato:
- “Cuando nos quisimos dar cuenta, Ignacio se había ido a socorrer a la mujer y estaba dando con el monopatín a uno de los terroristas. Pero antes de que pudiésemos reaccionar le vimos irse al suelo… Y entonces vi que uno de los terroristas se venía hacia mí, y yo le tiré la bicicleta y salí corriendo. Estaba claro que sabían lo que hacían y llevaban unos cuchillos enormes. Además, estaban todo el rato gritando”.
La realidad de entonces confirmó la peor de las noticias, con la muerte de Ignacio.
Pero su heroísmo ha hecho historia y hoy es justo recordar aquellos momentos tal y como los vivimos entonces.
Porque los medios se han hecho muy poco eco de este 5º aniversario. Sobre todo para lo mucho que merece Ignacio. Un héroe de los de verdad. Un ser humano capaz de dar su vida por una persona a la que ni siquiera conocía.
¿Hay mayor generosidad?