Una canción resume el dolor y la esperanza en el funeral de uno de los fallecidos en el ascensor de Madrid
Ayer, en el colegio Nuestra Señora del Recuerdo de Madrid, su colegio, se celebró el funeral por José Amián, el chico fallecido junto a su novia, Belén Jordana, al desprenderse la pared del ascensor en el que se encontraban, hace poco más de una semana, en Madrid.
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El funeral de José en su colegio, con sus familiares, amigos y profesores, fue una ceremonia llena de emoción en la que la serenidad acompañó siempre a los duros momentos de dolor. Con una capilla abarrotada de compañeros y con la presencia de los padres de José y sus tres hermanos, así como los padres de Belén.
La madre de José tuvo el valor de leer la segunda lectura de la Misa, el Himno a la Caridad de San Pablo a los Corintios: “El amor es paciente, es servicial, no es envidioso, no se jacta, no lleva cuentas…. El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor no pasa nunca.
Y su padre leyó al final, con mucha entereza, un mensaje a su hijo: “Hola José. Hace dos años te fuiste a Estados Unidos y mamá lloraba porque íbamos a estar un año sin verte. Ahora no vamos a verte en mucho tiempo. Ya José. Ya sé que podemos hablar contigo como hacemos con Dios. ¿Nos vas a ayudar? Dices que hay un móvil que está en el corazón y que es el Amor de Dios. Estamos mamá y yo esperando a que nos ayudes a utilizar ese móvil”.
Durante la ceremonia, quizás uno de los momentos más emocionantes fue la canción que entonó el coro con la letra que alguien envió a la madre de José, y que ha corrido por whatsapp llenando de emoción a todas las personas que la han leído. Le pusieron la música de una canción de Taburete y fantásticamente cantada seguirá emocionando los corazones de quienes la escuchen y conozcan la historia de un chico y una chica, enamorados. que se fueron al cielo juntos y en lo mejor de la vida.
Esta es la letra:
Me tengo que ir,
me llaman de arriba.
El paso es difícil,
y es mejor hacerlo breve.
No intentéis entenderlo,
no dolerá menos.
Me tengo que ir
y me llevo compañía.
No me voy solo.
Me voy con quien quiero.
Ya volamos juntos,
directos al Cielo.
No intentéis entenderlo,
ha llegado mi hora.
Me reclaman de arriba,
para que desde allí,
os guarde.
Cuídate mamá,
cuida de todos.
Como siempre has hecho,
como siempre haces,
como siempre harás.
Me tengo que ir,
para poder ayudarte,
a cuidar de papá,
a cuidar de mis hermanos,
a cuidar de quién más quiero.
Me sentirás a tu lado,
cuando te cueste dormir,
estaré en tu pensamiento,
estaré siempre junto a ti.
Y tú me llevarás dentro.
Y cuando abras los ojos,
no vayas a despertarme,
habré pasado la noche,
velando vuestro descanso,
cuidando de mis hermanos,
descansando en tu regazo.
Ya os espero donde debo
y estoy bien acompañado
de la persona que quiero.
Me tengo que ir,
y junto a Ella te espero.