Zelensky: así es el presidente de Ucrania que se está ganando la admiración del mundo

Zelensky, todo un desconocido fuera de Ucrania, se ha ganado la admiración del mundo arriesgando su vida y la de su familia por defender a su país.

Y lo hace cada día. Una y otra vez. Rechazando las ofertas de un exilio cómodo y libre de cualquier riesgo.

Porque, al contrario de lo que hicieron otros teóricos líderes políticos de la actualidad, Zelensky ha preferido quedarse con su pueblo y sufrir los riesgos reales de la guerra para liderar desde dentro los movimientos de su país y su fe en Ucrania.

Vídeos que unen, fortalecen y traspasan fronteras

Y lo está haciendo con un arma tan sencilla que nuestros jóvenes la utilizan a todas horas: selfies en formato vídeo.

Tecnológicamente no hace falta mucho más que un smartphone.

Pero humanamente es necesario mucho valor, mucho coraje, mucho corazón, mucha convicción y mucho amor por su país.

Y eso es lo que hace que sus vídeos, con palabras tranquilas pero inflamadas de pasión y claridad, sirvan para unir a su nación y den voz al desafío ante la agresión rusa.

Los vídeos de un joven actor judío que creció hablando ruso y hoy conquista a toda una nación y al mundo entero.

Hace un mes era un presidente que parecía amortizado

Poco antes de conquistar el mundo con sus vídeos, Zelensky era un presidente que se tambaleaba en las encuestas.

Una especie de figura decorativa a la cabeza de su gobierno. Con escaso poder personal y menos carisma.

Incluso sospechoso de ser un títere colocado ahí por el oligarca Ihor Kolomoisky, que le ayudó a financiar su campaña y está investigado en Estados Unidos por fraude y blanqueo de capitales.

Pero la madrugada del jueves “nació” otro Zelensky

Pocas horas antes de la invasión de Rusia, en un discurso sobrio publicado en las redes sociales, otro Volodymyr Zelensky apareció ante sus conciudadanos.

Hablando en parte en ruso, aseguró que había tratado de llamar a Vladimir Putin para evitar una guerra y se había encontrado con el silencio.

Estaba delante de un mapa de Ucrania, vistiendo un traje oscuro, y afirmó con fuerza que ni Rusia ni Ucrania necesitaban una guerra. Y añadió:

“Ni una Guerra Fría, ni una guerra caliente, ni una guerra híbrida”.

Y sobre la posibilidad de que los ucranianos fueran atacados agregó:

“Cuando nos ataquen verán nuestras caras. No nuestras espaldas, sino nuestras caras”.

Poco después comenzó la invasión.

Su siguiente transmisión se produjo a mediodía, horas después de comenzar la ofensiva rusa en tierras de Ucrania.

Para ese momento Zelensky eligió ponerse el uniforme militar y dejó claro que el pequeño contendiente, su país, no estaba dispuesto a rendirse frente al gigante ruso.

Una especie de David contra Goliat versión siglo XXI.

Y esa noche, en un nuevo discurso, sus palabras se dirigieron fundamentalmente a los países occidentales:

“Si no intervienen en esta lucha, mañana la guerra tocará a sus puertas. Este es el sonido de una nueva cortina de hierro que se ha derrumbado, pero todavía separa a Rusia del mundo civilizado”.

A esas horas Zelensky ya se había convertido en un valiente comandante en jefe conquistando el entusiasmo de su pueblo, el apoyo total y el respeto de un país necesitado de una luz que mantenga su esperanza en las horas más oscuras.

Hoy, todos los ucranianos han cerrado filas en torno a su presidente, que está desempeñando un papel unificador e inspirador.

Lo admiran y lo respetan sinceramente.

• Primero por su propio ejemplo.
• Segundo, porque está liderando un gobierno/ejército/pueblo que durante varios días ha logrado repeler a Putin.

¿Quién era Zelensky antes de la Guerra?

Volodymyr Zelensky nació en 1978 en la ciudad central de Kryvyi Rih, al este de Ucrania.

Judío de habla rusa, se graduó en derecho en la Universidad Económica Nacional de Kiev.

En su trabajo profesional co-fundó una exitosa productora de televisión con la que produjo programas para una red propiedad del controvertido multimillonario Ihor Kolomoisky.

Y hasta mediados de la segunda década de este siglo su carrera en la televisión y el cine ocupó su vida.

Luego, en su campaña electoral fue acusado de corrupción al contar con el apoyo del oligarca Kolomoisky, que levantó muchas sospechas.

Pero Zelensky acabó con la mayoría de ellas cuando, una vez en el poder, se negó a permitir la reprivatización de PrivatBank, que era propiedad de Kolomoisky antes de ser nacionalizado.

Presidente, también en una serie de televisión

Zelensky llegó a la vida pública como si estuviese interpretando una serie de televisión.

Concretamente parecía estar dando vida a su papel más importante como actor cómico, que protagonizó la serie de televisión Servant of the People.

En ella, Volodymyr interpreta a un maestro de escuela que consigue llegar a la presidencia del país después de que un estudiante publica un video de él despotricando sobre la corrupción en la política, y se hace viral.

Por eso su candidatura en las elecciones presidenciales de 2019 fue inicialmente vista por algunos como una broma.

Y más porque lo hizo liderando una formación política a la que puso el nombre de Partido Siervo del Pueblo.

Zelensky arrasó en las elecciones pero…

Pero lo que muchos querían tomarse a broma no lo fue tanto. Y Zelensky ganó las elecciones con el 73% de los votos, prometiendo luchar contra la corrupción y traer la paz al este del país.

Claro que una cosa es hacer promesas tan ambiciosas y otra muy distinta es ejecutar estas políticas. Y el hecho de no conseguirlo comenzó a minar su fama.

Tampoco le ayudaron sus múltiples intentos de negociar con Rusia para encontrar una solución al conflicto en el este, que ha dejado más de 14.000 muertos.

Y aunque hubo intercambios de prisioneros y tímidos movimientos hacia un proceso de paz, conocido como los acuerdos de Minsk, realmente no había avances.

Y eso provocó que, a lo largo de 2020, su índice de popularidad cayera constantemente.

Los tambores de guerra le hicieron más fuerte

A medida que el redoble de la guerra se hizo más fuerte en Ucrania, Zelensky recuperaba algo de prestigio.

Declaró un Día de la Paz en el país y continuó manifestando sus esperanzas de una solución diplomática, incluso cuando Ucrania sufría un rápido aumento de las violaciones del alto el fuego en la línea del frente.

Pero durante todo el tiempo que pudo, siempre intentó evitar el tema de la guerra y cualquier cuestión militar.

Incluso puso siempre en duda las advertencias que llegaban de EE. UU. y de otros gobiernos occidentales, avisando a Ucrania de un ataque ruso inminente.

El gran cambio de Zelensky

Para todos los analistas políticos ucranianos, el gran cambio de Zelensky se produjo en el discurso que pronunció en la Conferencia de Seguridad de Múnich, el sábado 19 de febrero,

Comenzó sus palabras describiendo una visita a un jardín de infantes en el este del país, que días antes había sido alcanzado por un misil.

“Cuando aparece el cráter de una bomba en el patio de una escuela, los niños tienen una pregunta: ¿Ha olvidado el mundo los errores del siglo XX?”.

Y añadió ante las élites diplomáticas y de defensa de Occidente:

“La indiferencia te convierte en cómplice”.

A renglón seguido recordó a la audiencia el rechazo que Vladimir Putin había manifestado a un orden mundial liderado por Estados Unidos justo en la misma conferencia de seguridad, y exactamente 15 años antes.

Y Zelensky añadió:

“¿Cómo respondió el mundo? Con apaciguamiento”.

Aquel día, muchos de los opositores políticos de Zelensky en Ucrania decidieron que ya no era el momento de disputas y conflictos.

Es el primer objetivo para los “asesinos” rusos, y su familia el segundo

La inteligencia occidental afirma que el nombre de Zelensky es el primero en una lista de personas que las fuerzas rusas pretenden matar.

Y añade que su familia ocupa el segundo lugar de la lista.

Pero tanto él como ellos permanecen en Ucrania, pese a las múltiples oportunidades que han tenido de salir.

Y la realidad es que, hoy, este licenciado en derecho de 44 años, un actor cómico novato en política, se ha convertido en una voz tan fuerte que ha conseguido ayudar a levantar la moral de Ucrania.

Como dice Yulia McGuffie, editora jefe de la página web ucraniana, Novoye Vremya, poniéndolo en boca de unos de sus amigos:

“Zelensky de repente ha desarrollado unos “cojones” de proporciones cósmicas. Y esto realmente refleja la actitud que el país tiene hacia él en este momento”.